Cuando la aventura de la práctica del Básquetbol se puso en marcha, eran 16 o 17 los chicos que comenzaron a desandar el camino en lo que por entonces era conocido como “el tinglado” del Club Atlético Independiente de Ricardone.

    Tiempo después, son más de una centena los integrantes de las Categorías Formativas y más de 30 los mayores que se dividen entre Primera y Reserva los que entrenan en el ahora estadio de la institución. Sin dudas, un crecimiento exponencial para el deporte de la pelota naranja.

    Horas de ansiedad se viven en el C.A.I., ya que en la noche del próximo jueves estarán jugando nada menos que el Clásico ante Garibaldi, en partido correspondiente al certamen de Primera “C” de la Asociación Rosarina.

    Sobre el crecimiento y la actualidad de los más chicos, y sobre el grupo formado por los mayores, nos habla uno de sus entrenadores, Sebastián Giraudo, quien recalcó lo fundamental que resulta considerar al club como lugar de encuentro no sólo para la práctica deportiva sino también para el crecimiento y la maduración a nivel personal.

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Por h8000024